jueves, 14 de mayo de 2009

¡Ay, Rocío!


Hereje no es el que arde en la hoguera. Hereje es el que la enciende.
William Shakespeare

Hannibal: Claro, y yo soy Hanibal Lecter, el verdadero caníbal ¡no te jode!…
¿Como vas a ser la Blanca Paloma? ¿Estas crazy? Tía estas pa´ ya. Ponte un Nick impresionante, una personalidad especial, pero eso de ponerte Milagritos Ortodoncia del Rocío. ¡Anda! Que las vírgenes cobran por cada milagro. Que paso, paso, así de plano.
Milagritos Ortodoncia: Que no, no vayas a banearme. Estoy cansada de las burlas de los demás. Si quieres en el próximo salto de la reja te lo compruebo. Lo del piercing en los pezones, he mentido. Recuerda tengo pecho de madera y de tatuajes, nanay. No tengo piercing allí. Lo dije porque si no te aburrías y me cortabas. Estoy fastidiada, desesperada, en un “sinvivi”. Esto ya no es lo de antes. Ahora los obispos están haciendo política y francamente, a ese trapo, no entro.
Esto era más leve antiguamente. Que si la preparación del camino, que si el traslado, que si la devoción. Los bueyes , las carretas, el jamón, el fino, el rebujito, manzanilla “La Soléa”, los condones, las gambas, las tortillas, los tampones, el ”urbanson” para cantar sevillanas, los botos camperos. El polvo del camino, el polvo en el camino, el polvo en los pinos…Los Simpecados.
Ahora no, ahora es alquilar la casa de la “hermandá”, que si buscamos hostal pa´ quedarnos, que si el catering, que si el bronceador ultravioleta, que si el todoterreno.
Estoy “jartita”. Antes el mundo se emborrachaba hasta no perder la conciencia, luego se soltaba lo de las herencias: “Que si la tita murió en mis brazos”, “que si la abuela me quería más que a “naide”, que “yo era el ojito derecho de Papa”. Ahora no, ahora abogados, burofax y la música en ipod.
Por eso me metí en el chat, por eso Hannibal, quiero desertar de ser la Virgen. Solucionaría mi vida, con esto del Paro, estoy segura encontrarían sustituta en un pis pas. Creo haber sido funcionaria, la limosna entra en las deducciones, los curas de eso saben mogollón.
Dos semanitas antes del Rocío sería un golpe de efecto publicitario. La Virgen dimite, por causas mayores. Deja el puesto vacante. Eso me daría un brillito progre. Hasta “El País” me haría caso. Me empadronaría en otro lugar, he metido mi curriculum en Mercadona y si no, en Torremolinos en una disco gay me darían trabajo, claro, ahora sería otra descarriada, otra “outsider”.
Una vez humanizada, regularizada, si fallan mis cálculos podría vender historias íntimas a la telebasura. Imagínate si cuento la verdad de lo pasado entre la Santísima Pantoja y el Jodidísimo Julián. Si contara las madrugadas borrachas de muchos políticos entre el fervor, la coca y las pechugas “empaná”.
En verdad, el mundo ha crecido a pasos agigantados, la técnica me ha superado. Soy analfabeta emocional, lo mío son soluciones prácticas, instinto básico y Fe a granel. ¿Te quieres casar y el gachó no da el primer paso? Pos nada, a buscarte trabajo en otro pueblo, a ponerte mechas rubio cenizo natural. “Er nota” se pone celosón y si pasa de ponerte fecha de boda a la primera, ya vas aceptando otras invitaciones con el cambio de look. Y sanseacabó, no olvides que “Si un hombre te dice que necesita espacio, déjalo fuera”. ¿En qué se parece un hombre a las tormentas de nieve? En que nunca sabes los centímetros que van a tener, ni cuánto van a durar.
Antes los feligreses pedían que la vaca no se muriera, que el señor alcalde visitara su caseta pa´ trincarle algo, que los hijos consiguieran el paro agrario. Ahora no. Ahora piden cosas que no entiendo. Que si el caso Gürtel no alcance con su rayo demoledor a Andalucía , que Rajoy deje de decir gilipolleces, que el juez Garzón descanse y deje de abrir más cajas de Pandora. Que si el Yak 42 traía fiambres con las etiquetas equivocadas. Estoy loca, ni los “zolpidem” ni los” diazepam”, los “tranxiliums”, ni los torpedos triples de tila me hacen dormir. Claro soy pastorcita, porque cuento ovejas como tonta para poder pegar ojo. ¡Joder qué gente! Me conformaba con ser una virgencita encontrada, santurrona, balsámica. Que en mis fiestas la gente se concilie a la sombra de una hoguera, reproduciéndose calladitos, entre los pinos.
Y que “El Quema” aunque esté contaminado sea la fuente para bautizar peregrinos, cositas así…
Hanibal , además podríamos pedir una VPO. Tengo amigos, ¿sabes? Pondríamos una Venta de langostinos en Bollullos del Condao y criar niños para el campo, sin pretensiones. Con su Feria anual, su Romería, su: “Me dicen que ya soy viejo /Que ya no me quieren mirar/
no valgo pa´ na/Con tó lo que yo he pasao /Para poderlos criar /Ahora me vuelven la espalda..
El campo está “desespañolizado”, llenándose de moros, polacos y rumanos .Putas colombianas casándose con los calentorros del pueblo. Con la tontería esa reclamando “reubicación familiar”. Por eso, por patriótica, siempre cuido de Esperancita, ella tiene un buen par, ella nos salvará de la invasión… acaba de ser abuela ¡Olé y Olé y Olé…!
Aquí ni gripes porcinas, ni leche migá con sopas gordas, este país necesita mano fuerte. Los “sociatas” a la hoguera. Vaya panda de cabrones con su puta igualdad jodiendo a todo quisqui. Aquí mucha disciplina, mucho rezo y sanseacabó. Ni bodas mariconas, ni paridad, ni igualdad. ¿Dónde se ha visto que una mujer pueda mear de pie? ¡Me pongo de una mala hostia! ¿Será consecuencia de los antidepresivos? No vayas a creer que soy una vulgar reaccionaria. Con eso que estudias Filosofía y Letras.
Por eso quiero retirarme Hannibal, me he cansado de que las cosas pierdan su lugar. Me conformaría con feligreses creyentes, con curas sin carrera, con señoritos de toda la vida, con desmadre consabido, todo por lo bajini. Con mariquitas como Dios manda: graciosos, bordando y cuidando de sus madres. Quiero colgar mi trabajo ¡Anda llévame! Cocinaré, lavaré, aguantaré tus torcidas borracheras, tus porritos apestosos, tus meados fuera de la taza. Años llevo acostumbrada. Escucharé tus cavilaciones fantásticas, sin reclamar, te seguiré. ¡Sácame de este altar! Súbeme en tu Harley Davidson .Quiero sentirme libre cual caballo marismeño. Con mi hipoteca por pagar, con cuñadas odiándome, con mi ayuntamiento ladrón. Ganarme la normalidad de la gente, eso que despiadada, resignadamente, ha sido rebautizado como la felicidad…
¿Hannibal estas?

Richard Villalón
8 de mayo de 2009www.richardvillalon.com